Hoy en día es muy fácil hacer música desde tu cuarto y hacerla sonar relativamente bien basándote en una opinión personal o la de tus conocidos. Vivimos en la época de la música digital, donde no se necesita de una gran inversion para equiparse con un par de monitores, una interface de audio decente y un buen micrófono. Y no solo eso, vivimos en una época donde el conocimiento está al alcance de todos. Con solo un click, uno puede acceder a miles de video-tutoriales online para entender los principios de grabación, mezcla y masterización de audio profesional. Debido a estas razones, es muy fácil componer y poner música online sin ningún tipo de restricción en cuanto a calidad y cantidad. Entonces ... ¿Por qué gastar en una mezcla y mastering si lo puedo hacer yo mísmo? En la mayoría de los casos, el resultado del esfuerzo de un cantautor y/o autogestor sin años de capacitación es una canción con un volumen relativamente bajo comparado a lo que está sonando en la radio o por el contrario un audio sobre-saturado y con falta de espacio en la mezcla debido al exagerado uso de compresión digital, arruinando así la ejecución del artista/músicos respectivos y causando falta de interés en el consumidor. La razón es la siguiente: entender los principios de mezcla y masterización requieren años de algo que YouTube no te puede dar, y eso se llama experiencia. Internet no te enseña a ejercitar el oído, eso se logra con muchas horas de práctica y estudio. Con un poco de inversión, una persona puede convertir su grabación en un producto de calidad no solo en el plano creativo, sino también en el plano sonoro. Si un artista realmente quiere hacer una vida como músico/productor independiente y convertir sus creaciones en un producto que genere ganancias, tiene que concentrarse en una visión a largo plazo. Como en todo negocio, para generar ganancias hay que invertir primero. Por esta razón, es de suma importancia que todo músico independiente tenga planeado invertir una parte de su presupuesto en la mezcla y masterización de su música. No hay nada como invertir en un mastering o una mezcla bien hecha, que haga que tu canción suene increíble ... sabiendo que dejas tu arte en manos de profesionales que tienen el equipamiento y experiencia adecuados para lograr que tu canción suene igual de bien tanto en un equipo Hi-Fi como en un teléfono celular ... es el mejor regalo que puedes hacerte a tí mismo. Mejor aún, esta canción posiblemente te abrirá la puerta a mayores ganancias, ya sea trabajar con otros artistas, trabajar como productor o conseguir nuevos fans.  Recuerda que una vez que tu canción está al alcance del público, no hay vuelta atrás, y una canción va a durar para siempre, y tu música va a ser tu principal carta de presentación en una industria muy competitiva. Al delegar responsabilidades a terceros te estás brindando más tiempo para concentrarte en el plano creativo. Además piensa que si mezclas y masterizas tu propia música, pierdes objetividad ya que al tener la música tan dentro de tu cabeza ... meses y meses de ensayo...hacen que a la hora de editarla dejes pasar un monton de detalles que un oído externo y profesional va a saber resaltar sus virtudes o minimizar los errores comunes en las grabaciones. Así que ya saben, simplifiquen su vida, hagan lo que saben hacer, y déjenle el resto a los ingenieros.